*** En un acto cobarde encañonaron y amenazaron al reportero del diario de Coatzacoalcos, Édgar Irán López, luego de ser descubiertos embriagándose en las instalaciones de la comandancia *** Toda la bronca la inició el alcalde "Chuchín", quien intentó meter a la cárcel a otro comunicador, a Enrique Quiroz *** A los dos les quitaron todo su equipo de trabajo **** Al "levantado", lo fueron a tirar golpeado en un camino vecinal, cerca de Sayula de Alemán; se salvó de milagro le dispararon el tiro de gracia.
En un acto cobarde y luego de verse descubiertos, ya que se encontraban embriagándose dentro de la comandancia de la Policía Municipal (PM) de Oluta, elementos de la citada corporación intentaron matar al corresponsal del diario Órale de Coatzacoalcos, Édgar Irán López Hernández, luego de que salvajemente y a punta de pistola lo bajaron de la unidad oficial del corporativo Imagen del Golfo, tras una persecución desde La Villa hasta la entrada a la ciudad de Acayucan, a la altura de la gasolinera, ubicada en medio de ambos municipios.Los hechos iniciaron al filo de las nueve de la noche del pasado sábado, cuando el mencionado comunicador y el reportero de Diario del Istmo, Juan José Barragán, llegaron a cubrir un evento masivo del candidato electo en Oluta y ahí se enteraron que los uniformados se encontraban en estado de ebriedad y habían cometido desfiguros en agravio de varias jovencitas de la cabecera municipal.A la llegada del alcalde panista, Jesús Manuel Garduza Salcedo, y quien desde que el candidato de su partido perdió la elección no ha hecho más que atacar a quienes no estuvieron a su favor, el reportero de un semanario local, Enrique Quiroz García, tomó una foto cuando el munícipe reprendía a su elemento, quien ya se encontraba desarmado y sin el uniforme, detrás de la rejas de la cárcel municipal.Acto que molestó a “Chuchín”, como es llamado la primera autoridad, y le arrebató la cámara, acto seguido, tres gendarmes intentaron someter a una celda al reportero, pero este se defendió y salió de la comandancia, detrás de él, el agraviado, fue testigo de los hechos y también, le exigieron entregara la cámara.Tras el altercado, el alcalde se retiró a su domicilio, hasta donde el dueño de la cámara lo siguió y Hernández López, se retiraba a Acayucan, cuando unos ocho policías cubiertos del rostro con pasamontañas a bordo de la patrulla 001, lo siguieron desde la cabecera municipal y lo alcanzaron a la altura de la gasolinera ubicada entre Oluta y Acayucan, en donde lo bajaron, le arrebataron su mochila en donde traía su cámara fotográfica, una cámara de video y demás equipo de trabajo.Lo subieron a la patrulla y ahí arriba le exigían llamara a los demás medios para que no sacaran la información de que los policías estaban borrachos, la situación fue avisada, pues el agraviado aviso a su compañero Juan José Barragán, quien le exigió al alcalde que llamara a sus policías y dejaran de amedrentar a su compañero, sin embargo Garduza Salcedo, no tomó cartas en el asunto.Minutos después volvió a realizar otra llamada a su compañero de medio a quien le pidió que no sacaran nada, que luego explicaba más.Una hora después de que fue levantado, es decir a media noche, volvió a comunicarse a su domicilio particular y a su compañero de medio y con el apoyo de una patrulla de la delegación de la Secretaria de Seguridad Pública (SSP), acudieron a buscarlo en el camino de terracería de Correa y Sayula de Alemán, en donde fue dejado, luego de una tremenda golpiza y tras haber recibido un disparo que iba contra su cabeza, pero que por fortuna no le dio, además de robarle su cartera con documentos personales y 8 mil pesos, su mochila con una lap top, una cámara fotográfica profesional y una cámara de video.El comunicador, no sólo teme por su vida, teme por la seguridad de su familia, pues los uniformados no sólo le dijeron que le darían muerte, sino que regresarían por sus padres y los matarían.
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