Carta del Dr. Radamés Trejo al pediatra Macario

A mi amigo y maestro.
Dr. Macario Vázquez Rivera.

Quiero adivinar y comprender las razones que lo impulsaron a buscar la candidatura a la Presidencia Municipal teniendo tantas cosas en contra para el triunfo. Sabemos de la forma que desde hace unos pocos años se compran los votos para ganar en estas contiendas políticas, por eso me extraña que usted con la pocas posibilidades que la mayoría de la gente le concede, insistiera en esta lucha; quiero pensar que usted como muchos otros Acayuqueños estamos hasta la madre del nepotismo y oligarquía que venimos sufriendo, caso no infrecuente en toda nuestra región, donde vemos heredar los cargos como si fueran propiedad familiar.
Entiendo esa lucha, creo que la única manera de cambiar las cosas es saliendo a las calles y decirle a la gente y sobre todo a los que detentan el poder, QUE NO ESTAMOS DE ACUERDO, que si bien pueden manipular las masas con la fuerza de su dinero mal habido desde sus inicios, no deben pensar que todos estamos a gusto, que los que no dependemos de su limosna sabemos que quienes permanecen callados, legitiman con el silencio un reinado antidemocrático.
Pero por favor maestro, agilice su lucha, tome ese teléfono y llame a todos sus amigos, a sus vecinos y conocidos e invítenos a sus reuniones, a sus juntas de trabajo, a los lugares donde usted exprese sus ideas y permita que todos también mostremos la indignación por el abuso que se hace de la necesidad que tiene el pueblo de los apoyos básicos.
Hace unos días, con pena, escuché a una colega decir que ella votará por el PRI, porque el gobernador le dio trabajo a su hija, y entendí que desgraciadamente muchos no somos capaces de pensar en el bien general antes del bienestar propio, solo pensamos en la parte que nos conviene, sin reflexionar en la parte que perjudica a las mayorías. Pareciera que no se dan cuenta que resulta obligación del gobernante dar trabajo, como lo es también brindar seguridad a todos sus gobernados. Nos deja de importar el derroche de gastos superfluos si de pasadita nos toca una migaja. Le permitimos al gobierno que venda 1000 notarias en el Estado, y conceda miles de placas de taxi a unos cuantos vivales, mientras pocos trabajadores se benefician. Todos los días nos enteramos de un secuestro, de extorsiones, pero no decimos nada mientras no sea de nuestra familia ¿pero cuanto falta para que nos toque? ¿Sabe usted, Maestro Macario, que a muchos médicos ya les toco? Y que los afectados no han presentado denuncias formales porque sabemos que los delincuentes se encuentran protegidos por la policía, solapada por este gobierno que se quiere continuar.
Por eso yo apoyo su lucha y alzo la voz, porque tengo miedo de vivir entre delincuentes, tengo miedo de que mi familia sea secuestrada, tengo miedo de salir de la casa y ser asaltado, como ocurre diariamente en nuestras calles.
Maestro, todos sus amigos los médicos, clientes y los que sabemos de su bonhomía y honradez, estamos con usted.

Con todo mi afecto
Acayucan, Ver. 25 de junio del 2010
Dr. J. Radamés Trejo González