- El joven de 16 años murió
baleado al impedir el secuestro de su padre, afuera de su domicilio
- Tiene más valor que las
personas que lo asesinaron, la vida de mi hijo no puede quedar así: José
Hernández Marín.
Claudia Montero 14/03/2016
Texto alcalorpolitico.com/ Fotos Plumas Libres
"Mi hijo es un
héroe", aseguró el empresario xalapeño de la cadena de restaurantes
"Pollos Campirano", José Carlos Hernández Marín, al referirse a su
hijo de 16 años de edad, Carlos Fernando Hernández Domínguez, quien perdió la
vida al impedir que secuestraran a su padre.
El cortejo fúnebre del joven que fue asesinado este sábado 12 de
marzo por la noche a manos de la delincuencia organizada, acudió a la Plaza
Lerdo, donde se detuvieron para que familiares y amigos pidieran justicia ante
este acto de violencia.
"Yo exijo justicia, la
vida de mi hijo no puede quedar así, en manos de esos malandros. Me siento
indefenso porque soy muy fácil de localizar y no me da miedo morir, pero me
gustaría morir por algo que valga la pena no por gente sin escrúpulos,
ambiciosa y maldita. Hay que dejar la vida por algo que valga la pena".
Con profundo sentimiento, el
empresario relató que su hijo dejó la vida por salvar la suya y la de su menor
hermano, quien también se encontraba en el lugar de los hechos.
"En verdad que le
admiro el valor a mi hijo, tiene más valor que las personas que lo asesinaron,
porque él sin armas, con su carro decidió arriesgar su vida y se enfrentó a los
malandros armados con armas de grueso calibre".
Explicó que la noche del
sábado fueron atacados en la avenida Villahermosa cuando salían de uno de sus
negocios.
"Nos atacaron como si
fuéramos lo peor, cuando lo único que hacemos es dar trabajo a la gente y
luchar día con día".
Carlos Hernández, quien
estuvo acompañado de su esposa, hijos, familiares y amigos, exigió justicia y
la presentación de los culpables, pues sentenció que no descansará y luchará
hasta el final para que el asesinato de su hijo no quede impune.
Antes de realizar la
sepultura del cuerpo, la familia completa asistió al centro de la ciudad para
exigir a las autoridades que actúen al respecto.
Al grito de
"justicia" y con cartulinas de los asistentes, donde se podía leer:
"sólo tenía 16 años", el empresario explicó que no había recibido
amenazas con anterioridad y únicamente hace 3 años trataron de extorsionarlo
pero no lo lograron.
Es así que resaltó que el
hecho delictivo lo tomó por sorpresa, el pasado sábado por la noche, cuando
intentaron secuestrarlo y su hijo Carlos, quien se encontraba en otro automóvil
en la parte de atrás, se dio cuenta y decidió irse sobre ellos, aunque no se
percató si lastimó a alguno de los agresores.
La "gente mala"
dijo, piensa que a su familia le sobran los recursos, cuando en realidad lo que
les sobran son los problemas para seguir adelante.
"A mi hijo le quitaron
la vida unos malditos rufianes que sólo con las armas se dan el valor de
matarlo a uno, pero me siento muy orgulloso, él es mi héroe, porque en
automático me salva de que me lleven los malditos rufianes y ellos no se
tientan el corazón y le disparan".
Pidió a los medios de
comunicación dar seguimiento firme a este tipo de casos para apoyar con la
información que se pudiera recabar, pues hasta el momento en la Fiscalía
únicamente les pidieron su declaración.
De igual modo, refirió que
está muy dolido con la autoridad que no hace nada para resguardar a las
personas honradas, que lo que tienen lo hacen con su trabajo.
"Necesitamos poner un
alto a todo este tipo de problemas, ya estamos hasta la madre y perdón por la
expresión pero no sé qué tendrá que pasar para que alguien haga algo, no sé a
quién dirigirme. Yo exijo justicia".
La vialidad se vio
interrumpida por algunos minutos en el centro de la ciudad, ya que el cortejo
fúnebre se detuvo enfrente de Palacio de Gobierno, donde jóvenes, adultos y
familias completas que se conmocionaron con este caso, se unieron a la
exigencia para que las autoridades detengan la ola de violencia y actúen en
contra de los responsables.
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