Ángel Aguirre, gobernador de Guerrero. Foto: Miguel Dimayuga |
Desde hace meses se denunció, con nombres y
apellidos, que la administración pública en Guerrero estaba infestada de
narcopolíticos, corrupción e impunidad. Sin embargo, autoridades de los
tres niveles y partidos políticos callaron, protegieron e incluso
promovieron a los señalados.
Todo desembocó en el ataque contra los
normalistas de Ayotzinapa, uno de los episodios más brutales en la
guerra que México padece. A despecho de discursos y propuestas
populistas, el grado de infestación criminal que vive ese estado ha
aumentado.
CHILPANCINGO, GRO.
(Proceso).- La desaparición y probable asesinato de 43 normalistas de
Ayotzinapa exhibe el nuevo nivel de impunidad, corrupción y violencia
que se vive en el estado, donde la delincuencia controla grandes
territorios y es protegida por autoridades de los tres niveles.
En diciembre de 2013, Proceso dio a conocer que la
Procuraduría General de la República (PGR) inició una investigación
contra al menos 15 alcaldes por sus presuntos nexos con la delincuencia
organizada, y cuatro meses después, a principios de abril, el alcalde
perredista de Cuetzala del Progreso, Feliciano Álvarez Mesino, fue
detenido por agentes federales en Iguala.
Actualmente está preso por sus
presuntos nexos con el grupo delictivo La Familia.
Álvarez forma parte de la corriente política Grupo
Guerrero, dirigida por David Jiménez Rumbo y por el actual presidente
estatal del PRD, Carlos Reyes Torres. Éste y su hermano Crescencio,
alcalde de La Unión, fueron acusados –por Servando Gómez La Tuta, líder
de Los Caballeros Templarios– de tener relaciones con el crimen
organizado.
Pese a ello, la clase política local calló, cerró filas y
las autoridades fueron omisas ante los señalamientos públicos y
evidencias contra ése y otros alcaldes, además de legisladores locales
como el presidente del Congreso de Guerrero, el perredista Bernardo
Ortega Jiménez…
Fragmento del reportaje que se publica en la edición 1980 de la revista Proceso, actualmente en circulación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario