Último adiós a Ángel!
En
el Cementerio Particular Veracruzano, ante una tarde soleada le dieron
el último a dios a Ángel Humberto Marín Licona, hijo del jefe de
redacción de NOTIVER, Antonio Marín Cardín.
María Licona, madre del joven, dijo que “ahora que estás allá arriba, le damos gracias a Dios de que nos cuidarás. Si siempre nos has cuidado, ahora con más razón estoy segura de que estarás pendiente de su padre, de mí y de tu hermano”.
Sin soltar lágrimas, dijo que “ya le había pedido mucho a Dios por este momento. Por verte aquí, cerca, que me dieran esa tranquilidad. Gracias Dios mío, te lo entrego”.
Antonio Marín, en todo momento estuvo acompañado por sus amigos reporteros de la redacción de NOTIVER, empresa de comunicación para la que ha trabajado por más de 20 años.
También les acompañaron reporteros y fotógrafos de otros medios de comunicación que conocen a Toño Marín porque sabe ser amigo y ha mantenido un compromiso desde siempre con su profesión.
Mientras lo entregaban a la tierra, sus amigos prendieron sus celulares para entonar diversos ritmos de música de salsa, lo que más le gustaba al difunto, indicaron, y como una especie de homenaje a su eterna partida.
Manifestaron que no le olvidarán, y por su muerte, serán presas del miedo ante la inseguridad característica de estos tiempos que tantas vidas de jóvenes continúa cobrando ante la indiferencia de las autoridades de todos los niveles.
María Licona, madre del joven, dijo que “ahora que estás allá arriba, le damos gracias a Dios de que nos cuidarás. Si siempre nos has cuidado, ahora con más razón estoy segura de que estarás pendiente de su padre, de mí y de tu hermano”.
Sin soltar lágrimas, dijo que “ya le había pedido mucho a Dios por este momento. Por verte aquí, cerca, que me dieran esa tranquilidad. Gracias Dios mío, te lo entrego”.
Antonio Marín, en todo momento estuvo acompañado por sus amigos reporteros de la redacción de NOTIVER, empresa de comunicación para la que ha trabajado por más de 20 años.
También les acompañaron reporteros y fotógrafos de otros medios de comunicación que conocen a Toño Marín porque sabe ser amigo y ha mantenido un compromiso desde siempre con su profesión.
Mientras lo entregaban a la tierra, sus amigos prendieron sus celulares para entonar diversos ritmos de música de salsa, lo que más le gustaba al difunto, indicaron, y como una especie de homenaje a su eterna partida.
Manifestaron que no le olvidarán, y por su muerte, serán presas del miedo ante la inseguridad característica de estos tiempos que tantas vidas de jóvenes continúa cobrando ante la indiferencia de las autoridades de todos los niveles.
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