lunes, 16 de enero de 2012

Un gusano llamado Joaquín
Villalobos, de Colombia, al
combate del narcotráfico en México




Por Filadelfo FIGUEROA


Oaxaca, México.— El 7 de abril de 1993 en los diarios nacionales apareció una foto que llamó mucho la atención de los conocedores del tema de los movimientos armados centroamericanos: Joaquín Villalobos, uno de los históricos comandantes del Frente Faradundo Martí de Liberación Nacional de El Salvador, apareció regalándole un rifle Ak 47 a Carlos Salinas de Gortari, entonces presidente de México.
Según lo dicho por Villalobos, el arma se la había regalado Fidel Castro, y a su vez había decidido regalársela a Carlos Salinas.
Joaquín Villalobos se presentaba como consultor para la resolución de conflictos internacionales, y si le sirvió a Salinas pero para combatir al Ejército Zapatista de Liberación Nacional en Chiapas.
Seguramente por esos días Salinas ya tenía información de lo que estaba ocurriendo en Chiapas y por ello se trajo los servicios de Joaquín Villalobos, quien de jefe guerrillero pasaba a estar al servicio de la derecha en México.
Posteriormente siguió trabajando para Ernesto Zedillo y actualmente es el autor del plan para combatir al narcotráfico en México; sin conocer la realidad mexicana Felipe Calderón lo puso al frente de este programa.
Pero antes Joaquín Villalobos estuvo en Colombia, donde le vendió sus servicios al presidente Alvaro Uribe para combatir al narcotráfico y a las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC).

Y este mismo personaje es señalado como el que dio la orden para que mataran a uno de los poetas más grandes que ha dado este país, Roque Dalton.
Fue acusado de ser agente de la CIA, de pequeño burgués y bohemio, y la orden la dio el hoy responsable del combate al narcotráfico en México.
De Villalobos se ha escrito: Lider del ERP salvadoreño, extremadamente frío e inteligente, eso se lo reconocen quienes lo conocen o conocieron: presunto complice gestor y ejecutor de Roque Dalton, autor de multiples secuestros y asesinatos a sangre fría, Responsable de la "Radio Venceremos", elemento clave de la guerra Civil Salvadoreña, creador y ejecutor de acciones militares espectaculares, que hoy son objeto de estudio en las academias militares del mundo, renegado de su pasado guerrillero y maoista, "convertido" a la social democracia de la que afirma nunca salió, en una acción denominada la Traición de San Andrés, firma con el gobierno luego del conflicto un pacto en el que se entrega a la derecha, forma el partido democratico de efìmera vida (al pueblo no le gustan los judas) se retira de la politica activa y se vá a Oxford a Estudiar (¿Con que dinero?).
Finalmente el ERP se hunde en traiciones. (Tomado de El piñero / 16 de enero del 2012).

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