LAS VIAS DEL CUATOTOLAPAM

Foto histórica que se conserva en el archivo del Ingenio Cuatotolapam.

Nuestra amiga Wilka Aché, ilustra su columna de RIPIOS con estas históricas fotografías del Archivo del Ingenio Cuatotolapam.

COLUMNA: RIPIOS

Por Wilka Aché Teruí

Listos se encuentran los chacuacos del ingenio Cuatotolapam para desprender nubes de humo negro y llenar el pueblo de Juan Díaz Covarrubias de tizne, dos chimeneas ubicadas en el centro de la fábrica que se pueden apreciar desde la carretera Costera del Golfo pasando La Guadalupe hacia Veracruz, una más alta que otra, la más larga conserva el legendario nombre del ingenio por eso cuando alguien fuma mucho se dice "pareces chacuaco". A ciento cinco años de haberse fundado esta factoría (en 1904) con un trapiche implementado al parecer por holandeses o británicos para sacar alcohol, mieles y azúcar morena cuando se convirtió en ingenio azucarero con el nombre de San Juan Sugar luego pasó a llamarse en 1938 Compañía Industrial Azucarera (CIASA ) conservando la misma razón social hasta la fecha. Interesante es ver que dentro de las instalaciones se conserva una locomotora la número 105 como un monumento histórico y un vagón, también se puede ver las vías férreas que cuentan que salían los vagones del poblado estación Cuatotolapam y llegaban hasta las bodegas para ahí cargar los bultos de azúcar para posteriormente ser trasladados, dicen que a Rodríguez Clara para así llegar al destino final que era la Ciudad de México, además estas vías también eran utilizadas para acarrear caña con un tipo de carretas adaptadas a los rieles, hoy sólo quedan las carretas jaladas en tractores agrícolas para transportar materia prima sólo en caminos vecinales. De ahí el nombre de ingenio Cuatotolapam pues prácticamente se volvió una estación sin serlo, fue un centro de operaciones, toda la economía se concentraba en San Juan Sugar ahora llamado San Juan Díaz Covarrubias. Y si usted gusta ver a uno que otro "chacuaco" sin trasladarse hasta el municipio de Hueyapan, puede darse una vuelta en uno de esos tantos cafés al aire libre, chacuacos y chacuacas abundan donde quiera.