*** Era ampliamente conocida
en Acayucan *** Ella trabajó en el DIF municipal en el periodo 2000 – 2004 ***
Compartió sus conocimientos culinarios y botánicos con las mujeres de las
colonias y comunidades *** Mujer de lucha, guerrera, que de joven trabajó en la
zona serrana de Oaxaca.
Acayucan.-
Profundo dolor sufren las familias Cervantes – Primo y Cervantes - Catillo por el sensible fallecimiento de la maestra Lidia Cervantes, quien trabajó en el DIF Municipal en el periodo 2000 -2004, en la administración del doctor Joel Alarcón.
Debido a su avanzada edad, en febrero del año pasado tuvo una caída en la cuartería, ubicada en la calle Porvenir esquina Belisario Domínguez, en la que vivía con su nieta.
Debido a la pobreza en la que estaba decidió finalmente irse a vivir con uno de sus hijos en Irapuato del estado de Guanajuato, lugar en donde falleció pese a la asistencia médica.
En esta ciudad de Acayucan en donde vivió por muchos años, hizo grandes amistades, sobre todo cuando trabajó en el DIF Municipal.
Ella se encargaba de enseñar a las mujeres de las colonias y comunidades del municipio a preparar frutas conserva, pomadas y otros trabajos culinarios que ayudaron y siguen ayudando mucho en el sostén de hogares acayuqueños.
La maestra Lidia, pese a ser una abuelita, no le temía a la vida. Siempre andaba trabajando. Hacía diversos dulces, manualidades y salía a venderlos de casa en casa. De esa manera logró sacar adelante a su nieta.
Ella era originaria de Puebla y por muchos años maestra rural de la región serrana de Chontal, Oaxaca, lugar en donde le habría gustado que reposaran sus restos.
Doña Lidia, mujer de lucha, de esa gente dura, trabajadora, sabia, guerrera y de las que nos ponen la muestra de cómo enfrentar la vida.
Siempre tenía a la mano un consejo, una orientación, a los problemas, sobre todo de las mujeres.
Ella dejó de existir antier en la tarde, a la edad de 87 años, en Irapuato ciudad perteneciente a Guanajuato.
Desde estas páginas le mandamos a las familias Cervantes - Primo y Cervantes - Castillo nuestras más sentidas condolencias por ese trance tan doloroso por el que atraviesan, rogando a Dios que acoja en su santo seno a la maestra Lidia Cervantes Castillo y que a su familia le mande pronta resignación.
Descanse en Paz la Maestra Lidia.
Profundo dolor sufren las familias Cervantes – Primo y Cervantes - Catillo por el sensible fallecimiento de la maestra Lidia Cervantes, quien trabajó en el DIF Municipal en el periodo 2000 -2004, en la administración del doctor Joel Alarcón.
Debido a su avanzada edad, en febrero del año pasado tuvo una caída en la cuartería, ubicada en la calle Porvenir esquina Belisario Domínguez, en la que vivía con su nieta.
Debido a la pobreza en la que estaba decidió finalmente irse a vivir con uno de sus hijos en Irapuato del estado de Guanajuato, lugar en donde falleció pese a la asistencia médica.
En esta ciudad de Acayucan en donde vivió por muchos años, hizo grandes amistades, sobre todo cuando trabajó en el DIF Municipal.
Ella se encargaba de enseñar a las mujeres de las colonias y comunidades del municipio a preparar frutas conserva, pomadas y otros trabajos culinarios que ayudaron y siguen ayudando mucho en el sostén de hogares acayuqueños.
DOÑA LIDIA, MUJER DE LUCHA
La maestra Lidia, pese a ser una abuelita, no le temía a la vida. Siempre andaba trabajando. Hacía diversos dulces, manualidades y salía a venderlos de casa en casa. De esa manera logró sacar adelante a su nieta.
Ella era originaria de Puebla y por muchos años maestra rural de la región serrana de Chontal, Oaxaca, lugar en donde le habría gustado que reposaran sus restos.
Doña Lidia, mujer de lucha, de esa gente dura, trabajadora, sabia, guerrera y de las que nos ponen la muestra de cómo enfrentar la vida.
Siempre tenía a la mano un consejo, una orientación, a los problemas, sobre todo de las mujeres.
Ella dejó de existir antier en la tarde, a la edad de 87 años, en Irapuato ciudad perteneciente a Guanajuato.
Desde estas páginas le mandamos a las familias Cervantes - Primo y Cervantes - Castillo nuestras más sentidas condolencias por ese trance tan doloroso por el que atraviesan, rogando a Dios que acoja en su santo seno a la maestra Lidia Cervantes Castillo y que a su familia le mande pronta resignación.
Descanse en Paz la Maestra Lidia.
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