Por Sayda Chiñas Córdova
06 de septiembre del 2014
Coatzacoalcos, Veracruz.-
Entre cantos y oraciones, amigos y familiares despidieron a la niña
Karime Cruz Reyes, plagiada el pasado 15 de julio, al salir de la
escuela; la indignación y el dolor por la muerte de la menor fue el
sentimiento de muchos de los presentes, ya que desde hace una semana se
tenían indicios del lugar donde la habían inhumado.
Las exequias de la niña se realizaron en la Iglesia San pedro y San pablo, ubicada a un lado del colegio Anglo Mexicano donde asistía desde los dos años; sus cenizas fueron colocados en una pequeña urna de madera, al pie de una fotografía donde se le mostraba sonriente, coqueta, llena de vida. Los rostros de los padres de la menor, Alejandro Cruz Castro y Nora reyes Baruch, reflejaban el dolor y el cansancio de más de 60 días de haber vivido el horror del secuestro de la menor de sus hijos, la única nacida en Coatzacoalcos Vestidos con prendas de azul, el color de la tranquilidad y la paz, los padres escucharon la homilía y entre ratos sollozaban con los cantos que hacían alusión al retorno de los niños-ángeles al cielo. El padre de la menor fue el encargado de encender el cirio pascual, símbolo de la iglesia de la resurrección de cristo tras su martirio en la cruz. Solo se colocaron algunas flores blancas y se evitaron las coronas mortuorias. El Sacerdote que ofició la misa esa amigo de los padres y viajó a Coatzacoalcos para realizar el servicio; todo su mensaje se dirigió a ellos para que recuperaran la paz y recordaran a la menor con amor y no con tristeza. “ya le voy a darle voz a Karime, yo creo que al estar ya con Dios, ella fue parte importante de la fortaleza que tuvieron Nora y Alejandro, al estar en la gracia, le dijo a dios que le diera fortaleza a sus papas y hermanos” El prelado resaltó el apoyo que tuvieron los padres en su lucha por encontrar a su niña y la solidaridad que recibieron de amigos y personas que no los conocían, pues dijo “que era de bien nacidos intentar buscar a la menor” Tras la ceremonia religiosa, los padres salieron por uno de los accesos laterales de la iglesia para evitar a los medios de comunicación, pero de manera previa, Nora Reyes agradeció el apoyo de los reporteros y pidió que los dejarán vivir su duelo. Los amigos de la familia informaron que en los próximos días se emitirá un comunicado con la posición de ellos ante la investigación; también se dio a conocer que la corona enviado por el Procurador de Justicia, Luis Ángel Bravo será devuelta a sus oficinas a través de la funeraria. La mayoría de los asistentes manifestaron el dolor y la indignación que sentían, ya que los cuerpos no fueron entregados de manera inmediata a pesar de que se tenía información concluyente sobre el caso desde hace una semana. Confirmaron que la semana pasada, el procurador había sostenido varias reuniones con los padres en el Aeropuerto de Canticas, negando las versiones de que habían sido encontradas en el predio ubicado en la calle Marina Nacional y Bonfil, de la colonia Luis Echeverria, pero finalmente en ese sitio exhumaron los cuerpo. En contraste con las exequias de Karime, el adiós a Mónica Reyes fue muy sombrío y poco concurrido, tras darse a conocer la versión de la Procuraduría de Justicia del estado, de su participación en el secuestro de su sobrina. Las hijas de Mónica, realizaron una ceremonia más modesta, la cual no fue pagada por la procuraduría como la de la menor, en una sala de velación más barata. Los familiares tampoco quisieron hablar del caso, pero fue evidente la división que generó la conclusión de la investigación sobre la familia Reyes. FOTOS: Sergio Balandrano (Tomado de El Piñero de la Cuenca). |
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