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| Policías detienen a una mujer que participaba en la marcha a favor de Guzmán Loera. Foto: Juan Carlos Cruz |
MÉXICO, D.F. (apro).- La violencia volvió a aparecer en la segunda marcha pro Chapo
en Culiacán, Sinaloa, con la detención de 211 personas –173 hombres y
38 mujeres, la mayoría de los cuales recuperaron su libertad en el curso
de este lunes– y la agresión a tres reporteros del diario Noroeste por parte de la policía.
En
conferencia de prensa, el secretario de Seguridad Pública y Tránsito de
la entidad, Héctor Benítez Verdugo, detalló que las personas que siguen
detenidas saldrán libres en las próximas horas. “No se les aplicó
ninguna multa, nada más es arresto”, dijo.
A su vez, la Comisión
Estatal de Derechos Humanos (CEDH) condenó las agresiones contra los
tres periodistas que cubrían la manifestación e informó que ya abrió una
investigación por esos hechos.
“Condenamos la agresión que se
genera a medios de comunicación, de manera particular a periodistas.
Como autoridad de derechos humanos hemos recibido una serie de quejas”,
sobre todo aquellas que han constituido agravios contra medios de
comunicación, y se ha abierto ya el expediente correspondiente,
puntualizó el presidente de la CEDH, Juan José Ríos Estavillo.
Además,
dijo, se inició otra investigación por los disparos que efectuaron los
agentes policiacos para dispersar la manifestación.
“Con el
respeto que nos merece la autoridad gubernamental, le conminamos a que
los ejercicios de colaboración y coordinación con otras instancias del
gobierno, como pueden ser las federales, se lleven a cabo sobre todo en
posibles actos que tengan que ver con posibles contenciones al derecho
de manifestación que tiene cualquier persona”.
Añadió:
“No
puede responderse de manera desproporcionada a los ánimos de intención
que pueda tener una persona con el derecho de manifestarse”.
Por
su parte, el secretario general de Gobierno de la entidad, Gerardo
Vargas Landeros, ofreció una disculpa pública al gremio periodístico y
al diario Noroeste por la agresión que sufrieron los reporteros de esa casa editorial a manos de elementos policiacos.
En
entrevista telefónica, el funcionario estatal aseguró que la Fiscalía
de Sinaloa inició ya una investigación para ubicar a los policías que
golpearon a los periodistas y aplicar la sanción correspondiente, en
este caso –puntualizó– su despido inmediato.
“Una disculpa pública
por parte del gobierno a los reporteros lastimados. Estamos haciendo la
investigación en contra de las manifestaciones, por supuesto que no
estamos a favor de ellas. Nadie puede ir en contra de una acción de ley.
Esperemos que no ya no se den estas manifestaciones ni a favor ni en
contra”, subrayó.
Ayer, durante la marcha convocada a través de
redes sociales para demandar la liberación del líder del Cártel de
Sinaloa, tres reporteros del diario Noroeste fueron golpeados y agredidos por agentes policiacos, quienes además robaron el equipo de fotografía y video de los periodistas.
De
acuerdo con información difundida por el periódico, uno de sus
reporteros fue agredido en Culiacán después de que los uniformados
dispararon al aire en la avenida Álvaro Obregón, entre Francisco Villa y
Francisco I. Madero.
Tras las detonaciones, el fotoperiodista
sacó su cámara para fotografiar los casquillos que cayeron a la calle.
En ese momento al menos 15 agentes de las policías Municipal,
Ministerial y de Elite, se abalanzaron sobre él.
“Lo aventaron al
suelo, boca abajo, lo esposaron, le cubrieron la cabeza con una bolsa de
plástico, lo patearon en la cabeza, costillas y piernas; quebraron su
cámara fotográfica y se la llevaron. Luego lo liberaron”, detalló el
diario.
En el mismo lugar y también tras los disparos, añadió, una videógrafa del portal Noroeste.com
fue jaloneada por cuatro agentes del grupo Elite de la Policía Estatal
Preventiva y la despojaron del teléfono con que grababa video del
momento en que la gente corría al escuchar las detonaciones.
Un
par de horas antes, en la marcha a favor de Guzmán Loera en Guamúchil,
agentes de la Policía Ministerial “ahorcaron” y golpearon al reportero
de Noreste cuando fotografiaba a un detenido, y le destrozaron la cámara fotográfica.
A
la manifestación del domingo 2 para exigir la excarcelación y oponerse a
la extradición del líder del Cártel de Sinaloa asistieron alrededor de
mil 200 personas, de las cuales 211 fueron detenidas.
Los uniformados argumentaron agresiones a su persona y violaciones al Bando de Policía y Buen Gobierno.
En la capital sinaloense, los simpatizantes de El Chapo
se dieron cita en la Plaza Fiesta, donde se dio el primer forcejeo con
los policías. Minutos después el contingente partió rumbo a La Lomita.
En
la esquina de Emiliano Zapata y Lázaro Cárdenas los agentes volvieron a
interceptar al grupo y detuvieron a mujeres y hombres.
Los que
quedaron en el lugar tomaron varias calles y abordaron vehículos para
llegar a La Lomita, de acuerdo con información publicada por Noroeste.
Según
el diario, desde las nueve de la mañana, con movimientos de disuasión y
distracción por ambos lados, frente a la capilla de Jesús Malverde, los
estrategas de la marcha fueron diseñando el plan para avanzar.
En
la Plaza Fiesta, precisó, se registraron arrestos de seguidores de
Guzmán Loera, “halcones” y hasta mirones ocasionales, donde se
replegaron, introdujeron y reagruparon los pro Chapos.
“Se pide respetuosamente que se retiren”, decía un mando policiaco.
En un movimiento de piezas, las personas que se habían dispersado se trasladaron y reagruparon en La Lomita.
Las detenciones de hombres y mujeres, jóvenes y adultos fueron despejando el recinto y su explanada.
Un
contingente numeroso de adolescentes tomó el Bulevar Emiliano Zapata
con un bullicio de fiesta y fandango, con consignas adaptadas.
“Se ve… se siente… El Chapo está presente…”.
De
acuerdo con el diario, las muestras de apoyo eran masivas. Cláxones y
puños en alto, la fotografía desde el celular, el grito de apoyo a la
marcha, que tomó la avenida Álvaro Obregón rumbo a La Lomita.
Cientos de manifestantes con cartulinas y lonas impresas, apuntó, pedían la no extradición del de La Tuna.
No
faltaron los actos vandálicos. Un grupo de adolescentes que participó
en la marcha agredió a un indigente en las calles Ángel Flores y Domingo
Rubí y lanzaron botellazos a un camión urbano, a una patrulla de la
Policía Estatal Preventiva y a otra de la Policía de Tránsito.
De
norte a sur, entre bulevar Francisco I. Madero y Francisco Villa,
policías apostados impidieron el paso a los simpatizantes de El Chapo. Los jóvenes se replegaron, pero luego se armaron de valor y se fueron de frente.
Los
policías dispararon al aire. La descarga hizo correr a los
manifestantes al oriente y poniente de la avenida Madero. Los policías
salieron tras ellos.
“Pa’ que agarren la pinche onda, hijos de su p… madre…”, se escuchaba entre los gendarmes.
Luego vino otra descarga frente al edificio El Dorado y la agresión a un fotoperiodista de Noroeste y el conato de pleito con los compañeros del reportero, que insistían en ir por el agredido.
“Si hasta ustedes mismos se beneficiaron de El Chapo, cabrones”, soltaban las personas detenidas por la policía.
Y el “yo te sigo y tú te escondes” continuó 12 horas después del comienzo de la jornada, detalló el diario.
Desde
las 10:00 horas y hasta cerca de las 21:00 horas, los agentes de las
policías Municipal, Ministerial y Estatal Preventiva intentaron disuadir
las manifestaciones, pero fracasaron.
Esta es la segunda manifestación celebrada en Culiacán a favor de El Chapo.
El miércoles pasado, más de mil personas desfilaron por la principal
avenida de la capital de Sinaloa para exigir la libertad del capo.
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