viernes, 27 de agosto de 2010

Columna: DE POLITICA Y ESA FAUNA…



Por Rosalino Guillén Tapia

Quiero creer, junto con todos ustedes, mis amables lectores que, eso sí no creo que sean muchos, que todo lo creado como nosotros mismos, tiene un objetivo claro y específico. Por ello, cuando los partidos políticos afloraron a la luz, traían consigo un enfoque meramente político, pero en el caso del PAN, este partido obedeció, según su fundador Manuel Gómez Morín, a la visualización de la cúpula epistolar que lo convocara en 1929 para su fundación; a la deserción sumamente notoria y perjudicial para la fe católica, sobre todo de los jóvenes.

Después de numerosas pláticas lograron el diseño de lo que se convertiría en el Partido Acción Nacional, utilizando como base potencial los movimientos católicos reformados conforme a las necesidades operacionales para ejercer control sobre la juventud que se descarriaba debido al avance educacional que patrocinaba el gobierno laico imperante.

No obstante lo anterior y por algunos triunfos electorales aislados que el PAN iba consiguiendo, la dirección fue sufriendo cambios hasta llegar a las postrimerías del siglo pasado en que, el gobernador panista de Guanajuato Vicente Fox Quesada llama la atención de un grupo de empresarios y le proponen experimentar, con tácticas bien definidas por la mercadotecnia, con un plan preconcebido por ellos para que el blanquiazul acceda al poder político nacional en el año 2000, cosa que así se da y Fox es ungido Presidente de la República sin tener una preparación previa y esmerada pero, eso sí, su simpatía, su modo de vestir y hablar, hacen que los jóvenes que le dieron el triunfo en la urnas electorales se mantengan firmes en su apoyo y él, por su parte, quizá sin razonar nada a fondo, procura llevar las cosas como si fuera una obra cómica, sumamente cómica, cuyo primer personaje era él, secundado por su novia y luego esposa, Martha Sahagún.

Así las cosas, sin pena ni gloria termina su periodo de seis años, peleado con sus “amigos” (recordemos que Fox no llega directamente por el PAN sino por “Los amigos de Fox” como denominó la generalidad de la población a estos curiosos personajes que hicieron un cambio insólito en los planes priístas de seguir al frente de los intereses de México) y por tal razón al PAN le costó mucho aparentar que Fox era hechura del partido y que por lo tanto ellos, los panistas, ya tenían el poder federal en las manos y los priístas se quedaron descabezados puesto que tradicionalmente el Presidente de la República era el jefe máximo del partido. Después de este increíble suceso, en el 2006 se dejó venir otro triunfo del PAN con lo que el dominio del blanquiazul se puso en claro y el actual presidente, Felipe Calderón, panista de corazón, empezó a actuar luego de una decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación porque los Tribunales Electorales no llegaron a un acuerdo razonable sobre el tan cuestionado triunfo del PAN en las elecciones.

Ahora bien, a nivel de reflexión desde mi muy particular punto de vista, así como se notó en Fox la falta de preparación para el ejercicio de tan alta investidura, cosa que puso de manifiesto el que el PAN no fue creado para gobernar y por lo tanto, a los miembros más distinguidos no les daba por buscar posiciones políticas sino que simplemente aplicaban el poder del dinero para obtener las canonjías necesarias en el medio oficial que les sirviera para incrementar sus capitales. Así que, ante un panorama como ese, por muy avezado en las lides políticas que fuera Felipe Calderón todo indicaba que asumía un compromiso casi imposible de cumplir.

Actualmente, todo el gobierno es un caos; por un lado se lanza en el 2006 al ejército contra el narco y al correr del tiempo se descubre por las quejas ciudadanas que esta medida, tomada unipersonalmente por Calderón no dio resultados y ahora llama a las fuerzas políticas, a la Suprema Corte, a los Diputados y hasta los eclesiásticos para que lo apoyen y sugieran nuevas medidas, sobre todo que no afecten a la ciudadanía inocente, como ha venido sucediendo, pero el respaldo se niega y entonces amenaza con aumentar los impuestos en perjuicio de todos nosotros, como si hubiéramos tenido algo que ver con sus decisiones y la de los priístas que, igual a los panistas no ven más que los propios intereses y poco les importa la seguridad de nosotros.

Pero, mientras sigamos tomando en serio los problemas nacionales tendríamos que seguir con el del Cardenal Iñiguez que alborotó el gallinero al meterse en profundidades criticando el asunto de las adopciones de parejas de homosexuales y lesbianas que el DF que gobierna Marcelo Ebrard, aspirante perredista a la Presidencia de la República, está a punto de aprobar por medio de la Asamblea Legislativa. Ebrard, rápido decidió denunciar penalmente al Cardenal porque ofendió a los magistrados de la Suprema Corte al decir que fueron “centaveados” (“maiceados” dijera) por Marcelo para que no muestren desacuerdo en sus decisiones sobre el caso de los homosexuales y lesbianas. Como les decía esto es pan de cada día y lo importante para nosotros es lo que sucede por estos lares.

Y, efectivamente los panistas son únicos para pelear en terrenos donde hay dinero de por medio; con panistas como los que hay en Acayucan, que no llegan a un ciento, nada se puede lograr. Ellos no están preparados para obtener el triunfo y se conforman con la participación que da la obtención de los mandos medios en los Ayuntamientos y parece que le tuvieran miedo al triunfo en las principales posiciones por lo que cierran filas para que sus propios candidatos no triunfen. Desde luego, que hay cosas que sí les interesan como la elección de los dirigentes municipales y eso es porque desde ahí pueden controlar e imponer los candidatos que ellos desean porque sirven para sus fines egoístas ciento por ciento y que no llevan ningún beneficio para la gente en general.

De plano ya no me dan ganas de seguir buscándole tres pies al gato sabiendo que tiene cuatro. Pero olvidaba que esta semana regresaron los niños a la escuela, pero eso pasa a segundo término según mi apreciación, porque lo más importante para la pobreza de los trabajadores que apenas si ganan el salario mínimo sucedió la semana pasada cuando tuvieron que acudir a las papelerías a comprar cuadernos, plumas, plumones, borradores, lápices, libretas, uniformes y demás cosas que les exigen los maestros, sean de escuelas públicas o particulares y el ir a comprar que a veces representa el primer gasto porque hay que pagar taxi para llegar a Chedrahui. El tremendo susto fue cuando vieron los costos de los útiles escolares y demás cosas; a muchos no les alcanzaron los mil o mil doscientos pesos que llevaron para comprar y ahí los tienes pidiendo prestado porque simplemente no hay de otra. Lo que muchos nos preguntamos es ¿porqué tanto escándalo del gobierno en el sentido de que la educación es y debe ser gratuita conforme al artículo 3º. Constitucional? De las escuelas privadas no digo nada porque todos sabemos que tenemos que pagar los servicios educativos, pero que también las clases humildes tengan que pagar un servicio que deja mucho que desear por la irresponsabilidad de los maestros, desde luego con sus raras excepciones, como que no me cabe en la cabeza, sobre todo porque en estos tiempos. Los maestros son gente muy bien pagada, aparte de que muchos gozan de dos plazas o más, pero así son las cosas y ni quien proteste porque simplemente, quienes pagan el pato son los niños que luego son vistos como bichos raros por los profes.

Creo que, por el momento esto es todo lo que me permitieron escribir las molestias que me causan mi enfermedad (diabetes) y haciendo eco a las demandas de mi mujercita Pilar, de mi hijita Pilarica y del canijo de mi nieto (el niño más lindo que conozco) Juanito Caldelas Guillén, como el se autonombra, aunque su nombre completo es Juan Manuel Caldelas Guillén, me voy a retirar a descansar para estar al centavo para la próxima porque espero seguir estando en condiciones de salud para seguir “chocholeando” sobre las cosas que pasan en México y en todo el territorio nacional, así que, hay nos vemos pues.

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