* Ni trajo a Videgaray, solo Nuño
* No fue Pepe, ni Héctor y Mota se quedó esperando su saludo
Por Noemí Valdez
Reportera de NOTIVER
Foto Manuel Alvarado
Entre selfies y empujones, este martes, el presidente Enrique Peña Nieto, acudió al Instituto de Ecología A.C INECOL, ubicado en la antigua Carretera Xalapa-Coatepec, donde inauguró el Clúster Científico y Tecnológico BioMimic.
Desde temprana hora, académicos, investigadores e integrantes del gabinete estatal arribaron a la sede; los grandes ausentes del día fueron los senadores priistas, Héctor y José Francisco Yunes, a pesar de ser de los pocos invitados especiales a la ceremonia.
Ataviado con un traje “brillante” llegó el diputado federal Adolfo Mota Hernández, quien también figuraba como invitado especial, esperaba un guiño, algo que lo pusiera en los reflectores, pero ni un saludo recibió por parte del Jefe Máximo.
Otro de los grandes ausentes, fue el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, a Peña, solo lo acompañó el titular de la Secretaría de Educación, Aurelio Nuño.
Peña llegó en las camionetas negras blindadas, saludó a los integrantes del Ejército y de la Marina a quienes en voz alta, felicitó y halagó.
Vestido de manera casual, y flanqueado por su gente del Estado Mayor, se abrió paso entre los presentes que le pedían una selfies. Ahí el presidente se detenía, les tomaba el celular y el mismo tomaba la foto.
El gobernador de Veracruz, Javier Duarte corría tras el para que no lo dejara; tras 20 minutos de saludos, finalmente subió al estrado.
Escuchó atento los discursos, el de Duarte, sin prestar mucha atención, se le veía decaído, inclusive en varias ocasiones se sonó la nariz con un pañuelo.
Le tocó el turno de hablar,-- las alarmas políticas se encendieron—saludó sin emoción, al Gobernador ni su nombre mencionó, a los demás de rapidito, sin detenerse.
Habló de la importancia de la investigación, destacó que para este ejercicio fiscal se asignaron 90 mil millones de pesos, por lo que para el próximo año habrá recursos adicionales de 5 mil millones de pesos que serán destinados para la investigación. No se equivocó, esta vez, se acordó que Xalapa es la capital de Veracruz, leyó, y leyó sin parar.
En el terreno político, no hubo nada, ni señales de humo, ni miradas indiscretas, ni palmadas por la espalda, ni apapachos para nadie.
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