Isaín Mandujano
TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- Una semana después de que el
gobernador Manuel Velasco puso en marcha la Fiscalía para combatir el
delito de abigeato, ganaderos del ejido El Ciprés, en el municipio Las
Rosas, detuvieron e incineraron a un hombre de 35 años que fue
sorprendido en flagrancia cuando robaba cabezas de ganado.
Los hechos ocurrieron la madrugada de este lunes en las inmediaciones
del balneario Agua Azufrada, localizado a las afueras de Las Rosas,
cuando Rosario Gordillo Guillén, de 35 años de edad, subía ganado a su
camioneta, una Nissan blanca sin placas de circulación.
Al ser descubierto, pobladores del ejido El Ciprés lo golpearon hasta
dejarlo inconsciente, posteriormente lo subieron a la unidad, le
rociaron gasolina y le prendieron fuego.
Las autoridades municipales intentaron rescatar al detenido, pero no
lo lograron. Más tarde se filtraron en las redes sociales imágenes de la
camioneta quemada por los ganaderos, quienes desde hace meses
denunciaron el robo de ganado.
El linchamiento provocó tensión entre los pobladores, ya que el
presunto responsable de abigeato pertenecía a una asociación campesina
de Comitán, cuyos miembros empezaron a reunirse supuestamente para
incursionar a la comunidad, y amenazaron con prenderle fuego a la
presidencia municipal.
Apenas la semana pasada el gobernador Manuel Velasco y el procurador
Raciel López Salazar anunciaron la creación de la Fiscalía Especializada
para la Atención del delito de Abigeato, que tendrá agencias del
Ministerio Público Especializadas en Tuxtla Gutiérrez, Pichucalco,
Palenque, Tapachula, Pijijiapan, Cintalapa y Villaflores, ninguna de las
cuales se encuentra cercana a Las Rosas, donde ocurrieron los hechos.
Desde el año pasado Cesar Augusto Brindis, ganadero en la región
centro del estado, denunció que en toda la entidad había aumentado el
robo de ganado.
Explicó que para en Chiapas “hay tres factores que inciden de manera
sustancial (para que se dé el abigeato): el ladrón del ganado; la
autoridad que está en complicidad con el ladrón del ganado, que permite
que pase la carne y no hace la inspección sanitaria, ni en el
transporte, y el carnicero, quien es finalmente quien la distribuye, lo
que en conclusión refiere que es un equipo muy grande que sólo podrá
combatirse con la intervención directa de las autoridades estatales”.
De acuerdo con el artículo 291 del Código Penal del estado de
Chiapas, “comete el delito de abigeato el que se apodere de una o mas
cabezas de ganado ajeno, cualquiera que sea su especie, sin derecho y
sin consentimiento de quien legalmente pueda disponer de ellas,
cualquiera que sea el lugar en que se cometa el apoderamiento”.
Detalla, asimismo, que el delito de abigeato se sancionará conforme a lo siguiente:
“I. Si el robo fuere de una cabeza de ganado, se impondrán de tres
años seis meses a siete años de prisión y multa de cinco a 20 días de
salario.
“II. Si el robo fuere de dos a 10 cabezas de ganado, la pena será de
seis a ocho años de prisión y multa de diez a 25 días de salario.
“III. Si excediere de 19 y no más de quince cabezas, la sanción será
de ocho a 10 años de prisión y multa de 15 a 50 días de salario.
“IV. Si el número de cabezas fuere mayor de 15, la sanción será de 10 a 12 años de prisión y multa de 25 a 100 días de salario”.
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