Gráficas fuertes
Tomado de LaNigua.com
Presuntamente entre ellos está Moisés Sánchez
Caña Amarga
Por Hugo Morales Alejo
Las fotografías son propiedad de la agencia de noticias www.Multigráfica.com.mx , si las desean, acudan con ellos.
MIRALEJOS, SOLEDAD DE DOBLADO, VER.- En
este lugar se siente el miedo, la gente desea irse de sus casas, luego
de haberse visto envueltos, por cosas del destino, en un punto
geográfico de intereses del crimen organizado.
Todo comenzó, narran testigos, la noche
del 5 de enero, alrededor de las 17:00 horas, cuando la gente de la
comunidad, Miralejos, dedicada al cultivo de la caña, de alrededor de
300 habitantes, observó enorme movimiento de Marinos y del Ejército,
buscando “algo”. Luego los vieron alejarse con rumbo a la comunidad de
Oaxaquilla, famoso lugar por la elaboración de tamales de masa.
Posteriormente se dirigieron a Camarón de Tejeda, a la comunidad
conocida como Piedra del Indio, de allí a San Agustín, municipio de
Camarón de Tejeda ambos. “Ahí se la llevaron toda la tarde y noche,
buscando como locos”, dice la gente, por lo que la población, preocupada
de que se tratara de algún familiar herido o secuestrado, comenzó a
buscar por su cuenta, realizando el hallazgo de 3 cadáveres, dos de
ellos embolsados. Al lugar llegaron elementos militares, quienes
obligaron a la gente a alejarse, por la fuerza de las armas, lo mismo a
las policías de Soledad y Camarón, municipios colindantes.
En ese momento comenzó a llover como si
el cielo protestara de lo encontrado allí, tres cuerpos evidentemente
torturados, uno de ellos semi calcinado, separados unos cien metros uno
del otro. Al lugar, llegó un grupo de elementos militares con un sujeto
que los guiaba, con corte de pelo casquete corto, por lo que suponen que
era policía o militar. “Él los guiaba, el tipo que venía esposado,
rasurado como soldado, les decía aquí es donde está uno, aquí es donde
está el otro, a este lo partimos, a este lo quemamos…”
“Un cadáver tuvieorn que escarbar mucho,
para sacarlo. Otro está junto a un riachuelo, en otra pequeña zanja,
semi enterrado. El de la bolsa, iba en partes, como cortado en cuatro o
cinco pedazos, se le veía todo por dentro”.
Llegaron al lugar “otros” elementos de
Criminología del puerto de Veracruz, a decir de la gente, “eran otras
personas que decían en sus uniformes “Perito”, pero se quedaron lejos
del lugar, porque cuando estaban sacando a un cuerpo semienterrado
(otros “peritos”), con fuerte olor a haber sido quemado allí, en esos
momentos, los militares corrieron a esos señores, no los dejaron
trabajar y a los que estábamos allí nos detuvieron, nos quitaron los
celulares, con las fotos que estábamos tomando, nos dijeron que si
hablábamos de esto, iban a regresar a buscar a la familia. A todos nos
apuntaron para que nos fuéramos. No dejaron llegar a nadie, ni al
Ministerio Público”.
“Cuando se fueron con todo lo que
recogieron, nos volvimos a acercar a buscar y no había rastro de nada,
como si no hubiera pasado nada. Como a las dos horas, llegaron otros
militares y patrullas de estatales, pensábamos que nos iban a detener,
pero no fue así, fueron muy amables con nosotros. Nos comenzaron a pedir
datos y preguntaron por el asunto. Es ahí donde dijimos “ora, pero
ustedes mismos son los que se los llevaron. Se quedaron sacados de onda y
pidieron santo y seña de cómo fueron las cosas”
Esos militares que llegaron al final,
son los que anduvieron como locos buscando desde temprano, los mandaron a
Soledad, a Camarón, a Piedra del Indio, a San Agustín, mientras que los
otros recogían todo.
Allí les agarró la noche, buscando en lotes baldíos, no hallaron nada, se retiraron y volvieron a venir a la mañana siguiente.
Cerraron la carretera Camarón-Soledad,
no se podía pasar de un municipio al otro. Eran muchos, muchos soldados,
pero como de otro tipo de los que se llevaron a los muertos,
La gente asegura que uno de los
embolsados fue llevado al anfiteatro más cercano, que está en el panteón
de Paso del Macho, inclusive existen fotos de los restos en dicho
lugar.
Hoy, Miralejos vive en la zozobra, en su
ya de por sí estigmatizado municipio Choleño (gentilicio que se le da a
los habitantes de Soledad) como tierra de nadie. “Lo que ocurre en
soledad se quedan en Soledad”, donde no hay casi periodismo, por el
control que tienen grupos del crimen organizado. Algunas familias de
esta parte poniente de Soledad planean irse, por miedo, porque, aunque
nadie habló abiertamente, trascendió el hallazgo de los cadáveres, entre
los que se rumora está el de Moisés Sánchez Cerezo, reportero de
Medellín de Bravo, , Veracruz, desaparecido desde el 2 de enero, cuando
fue sustraído por un comando armado, de su domicilio.
El sujeto que la gente narra
que iba esposado, señalando el lugar donde estaban los cuerpos humanos,
podría ser uno de los policías municipales de Medellín de Bravo,
arraigados, por la desaparición del reportero mencionado.
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