Una de sociales a petición de la concurrencia y para terminar con rumores malsanos que hablan de agujeros en la canoa y de marranos que se van al monte:
En diciembre hay bodorrio en Minatitlán ¡por fin! se casa Marcos Theurel, secretario de Comunicaciones, con una hija de la alcaldesa, Guadalupe Porras David. El padrino será obviamente el number guan y la primera ñora del estado, el padrino de lazo será Flavino Ríos y el de arras sería el alcalde Marcelo Montiel pero dicen las malas lenguas que como son rivales de grupo político, desistió del apadrinamiento y entonces entró al quite Ivan Hillman Chapoy, quien fue aceptado a regañadientes por el futuro desposado pues con eso de que perdió las elecciones pasadas, no sea que le transmita la mala suerte y no llegue a la candidatura por Coatzacoalcos, y se la gane Gonzalo Guízar Valladares, quien por cierto no está invitado a la comilona de pejelagarto y barbacoa de borrego.
Para organizar la mega-boda tanto Porras como su futuro yerno están pasando la charola en todo el gabinete y todos los constructores, solo falta que pongan la mesa de regalos en conocidas cementeras... y desde ahora va el aviso para muchos tundes –constructores que se reservarán el derecho de admisión a la pachanga no sea que alguno quiera cachetear al novio reclamando el cobro del diezmo por los contratos. (Fragmento de la columna: SALE Y VALE/ Notiver/ 24 Oct., 2009).
En diciembre hay bodorrio en Minatitlán ¡por fin! se casa Marcos Theurel, secretario de Comunicaciones, con una hija de la alcaldesa, Guadalupe Porras David. El padrino será obviamente el number guan y la primera ñora del estado, el padrino de lazo será Flavino Ríos y el de arras sería el alcalde Marcelo Montiel pero dicen las malas lenguas que como son rivales de grupo político, desistió del apadrinamiento y entonces entró al quite Ivan Hillman Chapoy, quien fue aceptado a regañadientes por el futuro desposado pues con eso de que perdió las elecciones pasadas, no sea que le transmita la mala suerte y no llegue a la candidatura por Coatzacoalcos, y se la gane Gonzalo Guízar Valladares, quien por cierto no está invitado a la comilona de pejelagarto y barbacoa de borrego.
Para organizar la mega-boda tanto Porras como su futuro yerno están pasando la charola en todo el gabinete y todos los constructores, solo falta que pongan la mesa de regalos en conocidas cementeras... y desde ahora va el aviso para muchos tundes –constructores que se reservarán el derecho de admisión a la pachanga no sea que alguno quiera cachetear al novio reclamando el cobro del diezmo por los contratos. (Fragmento de la columna: SALE Y VALE/ Notiver/ 24 Oct., 2009).
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